Javi Martínez se ha acostumbrado a irse del Athletic por la noche. Hace dos semanas ya tomó un vuelo de última hora fletado por el Bayern que le llevó desde Biarritz a Múnich para pasar el reconocimiento médico en su nuevo equipo. Ahora añade otro episodio nocturno a su traumática salida del club. El navarro se presentó a las dos de la madrugada del pasado domingo en Lezama para recoger sus pertenencias de la taquilla. El asunto le costó un enfrentamiento con los sorprendidos guardas de seguridad de las instalaciones rojiblancas.
Al parecer Martínez se presentó el pasado fin de semana en Bilbao para recoger sus pertenencias. El sábado organizó una cena de despedida con algunos de sus amigos. Ya de madrugada, el jugador exrojiblanco acudió a Lezama y saltó la valla.
El servicio de seguridad del club se quedó sorprendido al ver al jugador acompañado de otras personas en torno a las dos de la madrugada en las instalaciones del club. El ya exrojiblanco explicó que iba a recoger las pertenencias de su taquilla en el vestuario, que, al parecer, no había podido vaciar, ya que su repentino viaje a Múnich no le había dejado tiempo.
El centrocampista se llevó después la sorpresa de que su taquilla estaba vacía y que sus objetos personales se hallaban recogidos en una bolsa dentro de uno de los despachos de Lezama.